Kilim es un tapete o alfombra confeccionada en un tejido plano o sin pelo anudado. Mucho las ligera que la alfombra clásica.

 

Vinculados originariamente  a los antiguos pueblos nómadas, y a su necesidad de improvisar en cualquier lugar de paso un amago de hogar, el kilim tiene una propension a la aventura, una naturaleza transformista, que  supera la agilidad de la alfombra.

 

Como personaje textil es mucho más abierto y adaptable, resuelve en un mismo gesto las demandas decorativa interactuando en cualquier ambiente.